martes, febrero 14, 2012

Hay que dejarlo que Pepe pague

Días atrás, la rionegrina Teté Coustarot estaba comiendo en un pequeño restaurante de Colonia, Uruguay,  cuando se apareció Pepe Mujica con su mujer, Lucía, en su VW Escarabajo del 81.



Todo el mundo se mostró asombrado (menos los responsables del local, pues la pareja es de concurrencia periódica a esa Casa).
El Pepe habló con todos. Fue respetado mientras almorzaban y al irse sacó su billetera y pagó como uno más . Teté llamó al mozo que la estaba atendiendo y le preguntó cómo es que le cobraban al Presidente de la República. A lo que el mozo contestó: "Si no lo hacemos, nos "mata" y no viene más".
Mujica tiene acostumbrada a su gente a esos gestos que nos recuerdan a Arturo Umberto Illia. 

De lo que ganan él como Presidente y su mujer como funcionaria le donan el 70% a su partido. Cuando le preguntaron por qué , responde "Le debo a mi partido lo que soy y es norma. Además si hasta hoy pude vivir con $4.000 uruguayos y ahora entre mi Señora y yo llegamos a los U$s 7.000 por mes, para qué queremos más?".
No cabe ningún comentario sobre contrastes entre estilos de presidentes contemporáneos y vecinos. Sobre todo en estos momentos de la vergonzante actitud de nuestros legisladores.