Otra imperdible. No pudo darse en cines por fallas financieras de la distribuidora. Sólo se volcó al mercado del DVD. Es una pena enorme que se diluya un canal de difusión de una obra valiosa.
"Nothing but the truth" (no tiene título en castellano) es del 2008 y agita la causa de una periodista del New York Times que estuvo encarcelada por no revelar la fuente de una información de alto riesgo de gobierno. Expone el drama interno norteamericano ante los límites imperiales a las libertades.
Describe los mecanismos de control y represión de la extrema derecha imperante: razones de "seguridad nacional" asfixian personas y sociedades. Se imponen sobre cortes y jueces apoyadas en los dominios de los organismos de "inteligencia".
Esta película de Rod Lurie, muy bien actuada por Kate Beckinsale, Matt Dillon y Alan Alda, debe ser vista y analizada en colegios y universidades.
Plantea la oscuridad de los manejos extremistas y el desalentador panorama que sobreviene de la imposibilidad de equilibrar esas conductas.
Lo que ocurre hoy en Honduras es la realidad palpable de devaneos imperiales que cortan toda aspiración de desarrollo democrático. En este caso, el país de Mel Zelaya enseña en la periferia del imperio el mismo desequilibrio del interior del estado dominador.
