Notas de interés sociopolítico acerca de los caminos de fortalecimiento de la democracia. Incorporemos la fenomenología del poder a las disciplinas de interés humanista.
miércoles, marzo 12, 2008
El último romántico
Hoy cumple 81. Es uno de los grandes seductores de la política argentina. No hay muchos más.
Ganó la Presidencia abrazando a todas las reivindicaciones. Las más urgentes. Prometió democracia cívica, sindical, económica, externa. Fue derrotado por el aparato concentrador de un sistema básicamente antidemocrático: el que admite los monopolios privados y públicos.
Se fue diciendo: "no pudimos, no quisimos, no supimos". Cometió el enorme error de no ejercer la autoridad que le fuera concedida.
Fue el último romántico. Persuadido de que el poder es una construcción social, se aferró a la Constitución y originó un gabinete de valiosas individualidades.
No aceptó que, al contrario de los actuales y más recientes, en un esquema dominado por los monopolios la fuerza política se basa en la potencia económica y financiera de una estructura.
Es un ingenuo. Mucho más que los que lo forzaron a renunciar y que quienes hoy gobiernan.
Feliz cumpleaños, RA.